Perrita que pasó más de 900 días en refugios encuentra un hogar ‘para siempre’

Perrita que pasó más de 900 días en refugios encuentra un hogar ‘para siempre’

La mascota fue adoptada en el refugio de Delaware, donde logró enamorar a una pareja de novios que sin dudarlo se la llevaron a casa.

Perrita que pasó más de 900 días en refugios encuentra un hogar ‘para siempre’ Imagen facilitada por el refugios de Delawere.
  • Jacqueline Alvarenga | 18-11-2020.8:54 am.

Charlize, es la perrita de raza mixta que pasó más de 900 días en distintos refugios y que tras una larga espera tiene un hogar para siempre luego que una pareja decidió adoptarla.

La mascota fue adoptada en el refugio de Delaware, donde logró enamorar a una pareja de novios que sin dudarlo se la llevaron a casa.

Según los cuidadores, Charlize fue asociada en julio del 2018 de SPCA a Delawere. En el otro refugio estuvo cinco meses sin que nadie decidiera darle un hogar.

Finalmente y tras más de 900 días, Anna y Matthew se la llevaron a casa para darle el hogar que tanto necesitaba.

La pareja indicó que les faltaba una mascota y que decidieron acudir al refugio, donde vieron a la perrita con una cara sonriente y disposición amistosa.

Luego de los trámites, ambos se llevaron a casa a Charlize sin sospechar que había pasado más 900 días a la espera de un hogar.

“No sabíamos cuánto tiempo había estado en el refugio hasta que la conocimos y, honestamente, no pudimos entenderlo”, la pareja.

Indicaron que la perrita se sintió emocionada al verlos y se va adaptando rápidamente a su nuevo hogar como si los conociera de toda la vida.

"Estoy feliz de que parece que ya confía en nosotros… Es como si la conociéramos desde hace mucho más tiempo que nosotros”, dijo Anna sobre la perrita que pasó más de 900 días en refugios.

En octubre el video de un perro que lloró al comprender que había sido dejado por sus dueños en un refugio se viralizó en las Redes Sociales.

La filmación la divulgó una de las empleadas del albergue para evitar que el animal muriera de tristeza, luego que sus dueños se mudaran de residencia y ya no hubiera lugar para él.

Según los cuidadores, el animal perdió el apetito y dejó de comer por completo, obligándolos a tomar medidas drásticas ante el dolor emocional del animal.