Obtiene Premio Nobel demostrando que un aumento salarial no disminuye la oferta de empleo

Obtiene Premio Nobel demostrando que un aumento salarial no disminuye la oferta de empleo

“Un aumento del salario mínimo no supone una merma del empleo: los empresarios siempre pueden recortar por otro lado”, cita el estudio del Premio Nobel, David Card.

Obtiene Premio Nobel demostrando que un aumento salarial no disminuye la oferta de empleo Fotografía cortesía, vía Getty Images.
  • Jacqueline Alvarenga | 12-10-2021.12:15 pm.

David Card, se hizo acreedor del Premio Nobel de la Economía al demostrar que un aumento al salario mínimo no disminuye o afecta la oferta de empleo.

El experto desarrolló un estudio en 1992 sobre el efecto del alza del salario mínimo en la sociedad. Su análisis lo realizó en los restaurantes de comida rápida de Nueva Jersey, Estados Unidos (EEUU).

Con los resultados de su experimento, se desarticula uno de los argumentos más comunes del empresariado para evitar incrementar el salario mínimo de los trabajadores: el desempleo por la falta de recursos para pagar los nuevos salarios y por ende la idea de que se disminuye la generación de nuevos puestos laborales.

En distintos países las negociaciones por un aumento anual del sueldo a los trabajadores se estanca para evitar que los empleados sean desfavorecidos.

De acuerdo con el economista, los puestos de trabajo no se ven afectados; pero sí los precios de los productos. Esto se deriva porque los empresarios buscan recortar otros gastos para que se dé la productividad.

El trabajo de Card para demostrar que un aumento salarial no disminuye la oferta laboral la llevó a cabo con el exasesor de los presidentes estadounidenses Bill Clinton y Barack Obama.

Fue ese estudio que atrajo la atención de la Real Academia de las Ciencias de Suecia, retribuyéndoles sus contribuciones que lograron contradecir lo que se creía por años.

“Card estudio las consecuencias de la subida del salario mínimo en Nueva Jersey sobre los trabajadores de cadenas de comida rápida y algunas zonas de Pensilvania”, ambas con distintas realidades.

En 1992, cuando se desarrolló el estudio, “Nueva Jersey decidió aumentar la paga, desde los 4,25 hasta los 5,05 dólares la hora”. Aunque se creía que el aumento de salario disminuye los empleos, no fue así.

“Se investigaron 410 puntos de ventas en ambos estados a través de un trabajo empírico, estudiante el efecto del incremento y empleando grupos de control.

Con lo anterior se permitió eliminar  el efecto que tienen en el resultado final otras variables diferentes a la que se pretende comprobar.

Para demostrar que el aumento de salario no disminuye la oferta se eligió a dos cadenas de comida rápida, las que más empleaban trabajadores de salario bajo.

De febrero a marzo de 1992 se realizaron las primeras entrevistas, mientas que en noviembre diciembre de 1993 se desarrollaron las segundas.

Las conclusiones del estudio y por el cual fue acreedor del Premio Nobel de Economía: “El salario medio de entrada había subido un 10% en Nueva Jersey, no solo no se había destruido empleo a tiempo completo, sino que se había creado, al contrario que en Pensilvania”.

Además de demostrar que el incremento no disminuye la oferta laboral, se produjo una pequeña migración de trabajadores desde el territorio que no había aumentado el salario mínimo hacia el que sí lo había hecho.

El único factor negativo fue que el aumento se trasladó a los consumidores, “el precio del menú aumentó más”. En otros restaurantes se redujo los beneficios complementarios, compensado el aumento salarial.

“El estudio, reafirma la tesis de que un aumento del salario mínimo no supone disminuye el empleo: los empresarios siempre pueden recortar por otro lado. Tras estudiar el caso de McDonald’s en diferentes estados entre 1986 y 1990, Card y Krueger también descartaron que el alza salarial desincentivase la apertura de nuevos establecimientos”.

Aunque el análisis se desarrolló en tiempos de bonanza, su creador lo aplicó dos años después, en plena recesión; confirmando el hallazgo de su primer estudio.

“Es poco probable que los efectos del alza del salario mínimo fueran ocultados por la mejora de la situación económica general. El alza del salario creó empleo”, se acotó.

El informe de Card contradice al Banco de España, ente que reveló que un aumento al salario sí disminuye la oferta laboral.

Según el ente financiero, España perdió tras una alza salarial 90 mil empleos.