Andriy Portnov, exasesor del expresidente ucraniano Víktor Yanukóvich, fue asesinado este miércoles en un colegio en Pozuelo de Alarcón, Madrid, capital de España.
El crimen del expolítico ucraniano ha despertado las alertas sobre el avance de la criminalidad en la nación europea, que lucha para evitar que las pandillas provenientes de Latinoamérica tomen el control de la región.
De acuerdo con la prensa ucraniana, el exasesor del expresidente ucraniano Yanukóvich era señalado de ser un colaborador de Rusia durante la guerra, destacando que él y su familia tenían activos en Moscú.
"Fue tiroteado en las puertas del Colegio Americano de Madrid, en el municipio de Pozueloa de Alarcón", se informó desde España.
Investigaciones revelan que la víctima acababa de dejar a sus hijos en el centro educativo cuando fue atacado a quemarropa por varias personas que le dispararon y luego se dieron a la fuga.
"Fue atacado cuando se disponía a subir a su vehículo, un Mercedes negro de alta gama. Le dispararon en la espalda y en la cabeza", se detalló sobre la muerte del exasesor del expresidente ucraniano Yanukóvich.
Portnov fue investigado por apropiación indebida de fondos públicos y de violación de los derechos humanos. "Estados Unidos lo acusaba de usar su influencia para comprar el acceso y las decisiones de tribunales ucranianos".
El crimen del expolítico ucraniano reavivó el debate sobre la lucha de la policía española en contra de miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13).