Diseño cortesía / Vía Google.
Son once estados clave que definirán este 3 de noviembre entre la reelección de Donald Trump o el triunfo de Joe Biden en un proceso electoral bastante reñido.
La carrera por la presidencia entre los demócratas y los republicanos está a horas de conocerse, mientras los estadounidenses continúan ejerciendo el sufragio.
De los 50 estados en la nación, once son considerados clave para definir quién será el próximo presidente de la nación norteamericana.
Arizona, Carolina del Norte, Florida, Georgia, Iowa, Michigan, Nevada, Ohio, Pensilvania, Texas y Wisconsin serían trascendentales por sus asientos en el Colegio Electoral.
De los once estados antes mencionados hay tres con mayoría de asientos electorales y que serían cruciales: Texas, Florida y Pensilvania.
De acuerdo con la cantidad de asientos electorales está sería el aporte de cada uno de los estados clave: Texas 38, Florida 29, Pensilvania 20, Carolina del Norte 15, Arizona 11, Ohio 18, Georgia 16, Iowa 6, Wisconsin 10, Michigan 16 y Nevada 6.
Según medios locales, Biden tiene asegurado 226 votos del Colegio Electoral de l9 estados más el Distrito de Columbia.
El candidato demócrata cuenta con los siguientes estados: Washington, Óregon, California, Colorado, Nuevo México, Minnesota, Nueva Jersey, Massachusetts, Connecticut, Nueva York, Illinois, Hawái, Rhode Island, Delaware, Maryland, Vermont, New Hampshire.
Por su parte, Trump tiene asegurado 125 votos, de 19 estados: Alaska, Utah, Idaho, Montana, Wyoming, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Kansas, Oklahoma, Missouri, Arkansas, Kentucky, Misisipi, Luisiana, Tennessee, Alabama, Carolina del Sur, Indiana, Virginia del Oeste.
Con los datos anteriores, Trump es el candidato que más necesita el voto silencioso y los asientos de los estados clave para continuar en la presidencia.
Las elecciones en EEUU no se definen por voto popular, sino por la cantidad de votos que aportan los estados clave por medio del Colegio Electoral. Esta entidad es el cuerpo de compromisarios electos encargado de elegir al presidente y al vicepresidente de los Estados Unidos.
Desde 1964 el Colegio Electoral tiene la tarea de definir al gobernante con los 538 electores. Para ganar la presidencia un aspirante necesita 270 votos electorales, obteniendo la victoria.
