Fotografía ilustrativa, de archivo y cortesía. / Facilitada por una tercera fuente.
La Iglesia de Inglaterra se niega a respaldar el matrimonio eclesiástico entre personas del mismo sexo, y anuncia que permitirá únicamente bendiciones de matrimonios civiles.
Luego de cinco años de debate, la postura de la Iglesia de Inglaterra sobre el sacramento del matrimonio no cambiará, asegurando que está restringido a las uniones entre un hombre y una mujer.
Sin embargo, las parejas del mismo sexo podrán tener un servicio religioso con oraciones de dedicación, acción de gracias o por la bendición de Dios después de celebrar una boda civil o registrar una unión civil.
De esta manera, el arzobispo de Canterbury Justin Welby, líder espiritual de la Iglesia Anglicana, reconoció que las propuestas sobre el tema “parecerán ir demasiado lejos para algunos y no lo suficiente para otros”.
“Esta respuesta sobre el matrimonio eclesiástico refleja la diversidad de puntos de vista en la Iglesia de Inglaterra sobre cuestiones de sexualidad, relaciones y matrimonio. Me regocijo en esa diversidad y doy la bienvenida a esta forma de reflejarla en la vida de nuestra iglesia” , dijo Welby.
Por otro lado, manifestó que emitió una guía pastoral para sus ministros y congregaciones y los instaría a dar la bienvenida a las parejas del mismo sexo sin reservas y con alegría.
“Espero que pueda ofrecer una forma para que la Iglesia de Inglaterra, pública e inequívocamente, les diga a todos los cristianos y especialmente a las personas LGBTQI+ que son bienvenidos y una parte valiosa y preciosa del cuerpo de Cristo”, agregó el arzobispo Welby.
Asimismo, el arzobispo de York, Stephen Cottrell, se disculpó por “la forma en que las personas LGBTQI+ y sus seres queridos han sido tratados por la iglesia que, sobre todo, deben reconocer a todos como preciosos y creados a imagen de Dios”.
El matrimonio civil entre personas del mismo sexo es legal en Inglaterra y Gales desde 2013, sin embargo, la iglesia no cambió su enseñanza cuando cambió la ley, por lo que, se espera que el Sínodo General discuta las propuestas en detalle durante su reunión del 6 al 9 de febrero .
