La Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC) responsabilizó a la administración de Juan Orlando Hernández por el masivo cierre de empresas en Honduras.
Según el director ejecutivo de la CCIC, Pedro Barquero, las medidas económicas “equivocadas” implementadas por el régimen impulsan el deterioro de la economía.
“Lo interesante es que los recursos drenados se han perdido por la corrupción y el Congreso se ha dedicado a pasar leyes como el Código Tributario, la reciente amnistía y la polarización con los fondos departamentales”, dijo Barquero.
Indicó que la política tributaria se ha encargado de drenar una enorme cantidad de recursos de la economía hacia el sector público.
Los millonarios fondos drenados podrían servir para generar empleo y circulante que necesitan los negocios para subsistir.
No es la primera vez que la CCIC denuncia que la política financiera de la dictadura deteriora la estabilidad económica y social de la nación.
Una de las preocupaciones es la baja en la inversión extranjera por ser considerado un país contaminado por el narcotráfico y la corrupción.