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El ejército de Israel atacó el sur del Líbano, sumando a la escalada en Oriente Medio, y iniciando una nueva guerra tras el alto al fuego en Irán.
El objetivo de esta nueva operación fueron las instalaciones utilizadas por el movimiento libanés Hezbolá en la zona de Beaufort Ridge, en el sur del Líbano.
Por medio de un comunicado de prensa, la Fuerza de Defensa israelí confirmó el ataque a varios lugares utilizados supuestamente para gestionar arsenal de fuego y defensa.
"La zona forma parte de un importante proyecto subterráneo que había quedado completamente fuera de servicio en ataques", dijo el gobierno hebreo sobre los bombardeos, registrados a escasos días de sellar un acuerdo de paz con Irán.
De acuerdo con Israel, los militantes de Hezbolá han utilizado el sur del Líbano para restablecer el complejo subterráneo. "El reciente ataque apuntó otra vez hacia esta infraestructura".
Israel explicó que la decisión de Hezbolá de volver a operar en el sur de Líbano es una violación a los acuerdos establecidos, razón por la cual decidió atacar.
"La presencia de este sitio y los intentos de restablecerlo constituyen una flagrante violación de los acuerdos entre Israel y el Líbano".
Al respecto, indicaron que no permitirán que Hezbolá vuelva a operar en la zona y que están dispuestos a volver a atacar.
