En un sorprendente y ambicioso esfuerzo por revolucionar la medicina moderna, el Gobierno de Estados Unidos ha decidido apostar por una iniciativa que podría cambiar la forma en que entendemos el envejecimiento cerebral: rejuvenecer el cerebro humano mediante la sustitución de sus partes por tejido joven cultivado en laboratorio. Este proyecto, descrito en un reciente artículo de la revista Technology Review del MIT, está siendo liderado por el biólogo Jean Hébert, quien ha sido contratado por la Agencia de Proyectos Avanzados para la Salud (ARPA-H).
Hébert, conocido por su enfoque innovador en el tratamiento antienvejecimiento, propone que la sustitución gradual del neocórtex, la parte del cerebro responsable de la memoria y el razonamiento, podría realizarse sin comprometer la identidad personal del individuo. Este concepto se basa en su obra "Replacing Aging", donde compara el mantenimiento del cuerpo humano con el de un automóvil, sugiriendo que reemplazando periódicamente tejidos y órganos se podría evitar el envejecimiento.
Los primeros experimentos de Hébert con ratones han mostrado resultados alentadores, donde pequeñas secciones del cerebro fueron sustituidas con éxito por lo que él llama "lodos de células embrionarias". Este avance plantea no solo la posibilidad de extender la vida humana, sino también de tratar enfermedades neurodegenerativas y reparar daños cerebrales.
Para llevar esta investigación a un nuevo nivel, Hébert ha solicitado un presupuesto de 110 millones de dólares, fondos que la agencia ARPA-H no dudó en aprobar. Este esfuerzo podría marcar el comienzo de una nueva era en la ciencia médica, con implicaciones que van mucho más allá del simple tratamiento del envejecimiento, abarcando innovaciones en la lucha contra enfermedades como el Alzheimer y los daños cerebrales causados por accidentes cerebrovasculares.