Inmunización a indocumentados en EEUU se dificulta por el idioma y la desconfianza

Inmunización a indocumentados en EEUU se dificulta por el idioma y la desconfianza

El Plan de Rescate de Estados Unidos del presidente Joe Biden por 1,9 billones de dólares incluye un programa para establecer centros comunitarios de vacunación en diversas partes del país.

inmunización Imagen cortesía de Telemundo.
  • Jacqueline Alvarenga | 23-01-2021.11:31 am.

Las nuevas autoridades de Estados Unidos se están enfrentando a dos desafíos importantes que evitan la efectividad de la inmunización de los inmigrantes indocumentados.

Se trata de la dificultad del manejo del idioma nativo por parte de los indocumentados y la desconfianza que sus datos sean utilizados para luego ser deportados.

A pesar que el nuevo gobierno ha prometido la vacunación masiva (inmunización), incluyendo a los trabajadores agrícolas inmigrantes, estos dos factores serían obstáculos que garanticen la efectividad de la campaña nacional.

De acuerdo con activistas, es el sector esencial o trabajadores agrícolas el más vulnerable y con mayor dificultad para recibir la dosis por el idioma y la desconfianza.

‘Algunos inmigrantes no autorizados temen que la información recabada durante la vacunación pudiera ser entregada a las autoridades y por ende podrían no buscar inocularse, mientras que quienes hablan poco o nada de inglés podrían toparse con la dificultad de acceder a las dosis’, indicaron defensores los indocumentados.

Parte de este problema podría resolverse con la nueva reforma migratoria promovida por la administración de Joe Biden, quien ha solicitado la ciudadanía de once millones de indocumentados.

El Plan de Rescate de Estados Unidos del presidente Joe Biden por 1,9 billones de dólares incluye un programa para establecer centros comunitarios de inmunización en diversas partes del país.

Datos oficiales revelan que los inmigrantes son el segundo sector más golpeado por la pandemia con cifras de muertes preocupantes.

Desde que comenzó la pandemia, activistas denunciaron que los trabajadores esenciales serían víctimas del contagio y los que más sufrirían las consecuencias.