Alfredo Rivera, de origen hondureño, se convirtió en el presidente de Coca-Cola a nivel norteamericano tras una amplia experiencia profesional, laboral y académica.
Rivera, asumirá el cargo con 23 años de experiencia y dirigirá la compañía en la región norteamericana con efecto inmediato.
“Alfredo ha tenido una carrera notable en América Latina que se compone de una gran cantidad de mercados muy complejos y diversos”, dijo el director ejecutivo de Coca-Cola Company.
El hondureño recientemente se desempeñó como titular del grupo para América Latina, demostrando un excelente desempeño profesional.
El cargo de presidente para Norteamérica lo asume tras la dimisión de James Dinkins, quien se jubila luego de 30 años trabajando para Coca-Cola.
Alfredo Rivera, de 59 años de edad, supervisó desde el 2016 los 40 países que pertenecen a Latinoamérica.
Se incorporó a la empresa en 1997 en la División de Centroamérica y el Caribe como gerente de distrito para Guatemala y El Salvador. Ocupó cargos de mayor responsabilidad en Brasil, Ecuador y México.
“Alfredo ha construido una organización en red que está posicionando nuestro negocio para emerger más fuerte de la pandemia actual”, agregó la máxima autoridad de Coca-Cola.
Al hondureño se le cataloga como un sólido sucesor del puesto principal América del Norte, ‘donde se basará en el gran progreso que hemos visto bajo el liderazgo de Jim”.
Su trayectoria profesional se suma a una licenciatura en Historia, una maestría en la Universidad del Sur de Mississipi y un Programa de Gestión Avanzada de Harvard Bussines School.
