Un hombre en estado de ebriedad intentó engañar a la policía sentando en el lado del conductor a un perro y evitar ser capturado.
La historia se viralizó en las redes sociales por el nivel de alcohol que esté hombre ingirió como para creer que era buena idea.
Según autoridades, entre los conductores ebrios es común la práctica de cambiar de piloto, pero este hombre cruzó los límites al poner en el asiento del conductor a su mascota.
El reporte policial señala que el 13 de mayo, un carro transitaba por una vía cerca a Main St a más de 80 kilómetros por hora.
Cuando lo detuvieron uno de los uniformados miró como el conductor se cambiaba de asiento, alertándolo de que se trataba de un ciudadano en estado de ebriedad.
Lo más insólito es que el hombre insistía en que él no era el que andaba conduciendo, señalando a su macota que estaba en el asiento del conductor.
“El conductor ebrio intentó hacerle creer a la policía que su perro era quien iba manejando”, destacaron los medios de comunicación.
Cuando el ciudadano vio que la policía no le creía su historia intentó huir corriendo, pero fue detenido por los agentes.
Ahora el conductor enfrenta cargos por conducir bajo la influencia de alcohol, exceso de velocidad y obstruir la justicia.
La policía mencionó que el perro del conductor fue entregado a un amigo cercano para que lo cuide mientras salga en libertad.