Alexis Hobson era una estudiante de primer año llena de entusiasmo que apenas comenzaba a crear recuerdos en la escuela secundaria cuando uno de sus compañeros abrió fuego, matando a cuatro compañeros de clase, hiriendo a seis más y a un maestro. Este trágico evento convirtió al instituto Oxford en otra víctima de la aparentemente interminable epidemia de tiroteos en las escuelas de Estados Unidos.
El campus, que antes albergaba esperanzas para Alexis, de repente se sumió en la tragedia.. Las clases se cancelaron por un tiempo, pero a diferencia de otras escuelas que cerraron o fueron demolidas después de masacres con armas de fuego, Oxford reabrió apenas unas semanas después de la pesadilla.
A pesar de la hipervigilancia que había desarrollado, Alexis estaba ansiosa por regresar. Aunque las clases se cancelaron por un tiempo, Oxford reabrió sus puertas casi dos meses después del tiroteo. Los perros de apoyo estaban allí para ayudar a reintegrar a los estudiantes, siendo un apoyo valioso en el proceso de recuperación.
Durante la escuela en línea, Alexis también pasó tiempo con perros de apoyo, enviando notas y tarjetas de regalo a sus dueños. Incluso pronunció un discurso para la inauguración de una estatua en el programa de perros escolares de una ciudad cercana.
Al comenzar su segundo año, Alexis decidió que estaba lista para volver a las clases presenciales. Aunque había días difíciles, la presencia de los perros de apoyo y su nueva rutina le brindaron la paz necesaria para recuperar su amor por la escuela.
Ahora, Alexis es conocida como la "niña del perro" entre sus compañeros. Aunque aún enfrenta desafíos, puede enfrentar el día con fuerza y tranquilidad, y ha vuelto a disfrutar de la escuela. Con una vida por delante, Alexis ha descubierto su sueño de asistir a una escuela de arte, donde puede expresar su creatividad a través de álbumes de recortes, pinturas y pequeñas pulseras para zapatos que vende en una tienda local.
Aunque Oxford el perro esté esperándola, Alexis sabe que tiene la fuerza para enfrentar cada día, incluso si él no está presente.