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El presidente de Francia, Emmanuel Macron, disolvió este domingo el parlamento de su país, la Asamblea Nacional, argumentando que se trata de un acto de confianza.
"He decidido devolverles la elección de su futuro parlamentario mediante la votación. Por lo tanto, disolveré la Asamblea Nacional esta tarde", dijo el gobernante confirmando la disolución del parlamento de la nación europea.
Macron detalló que sabe que la decisión es seria y dura, pero representa un acto de confianza. "Esta decisión es seria y dura. Pero es, sobre todo, un acto de confianza".
La impactante declaración ha generado una ola de comentarios y críticas, ante la posibilidad de la decisión se derive de la inminente derrota de su partido en las elecciones del Parlamento Europeo, proceso que se desarrolla este domingo.
"Confíen en ustedes, mis queridos compatriotas. En la capacidad del pueblo francés de tomar la decisión más justa", agregó el gobernante francés.
Expertos han señalado que la disolución del parlamento de su país es una respuesta por la derrota de su partido, Renacimiento.
"Proyecciones iniciales de las elecciones parlamentarias europeas revelan que la ultraderecha, por medio de la Agrupación Nacional, se impuso con el 31.5% de los votos", se informó sobre los resultados de boca de urna.
Los resultados del partido opositor superan en más del doble de su partido, que solo alcanzaría el 15.2% de los votos.
El líder opositor, Jordan Bardella, calificó los resultados como una repugnancia punzante en contra de Macron.
“Esta derrota sin precedentes del gobierno actual marca el final de un ciclo y el primer día de la era post-Macron”, dijo Bardella sin imaginar que una hora después se disolvería el parlamento de Francia.
Las elecciones europeas, que se desarrollan este domingo, son un proceso en el que los ciudadanos de la Unión Europea (UE) eligen a sus representantes en el Parlamento Europeo.
"La disolución de la Asamblea Nacional permite al Gobierno superar situaciones de crisis o bloqueo institucional, como ocurrió en 1962, 1968, 1981 y 1988, cuando hubo desacuerdos entre la mayoría parlamentaria y el Ejecutivo", explicaron analistas sobre la polémica decisión del líder francés.
