Foto: Shutterstock
Elon Musk, el hombre más rico del mundo, ha decidido invertir en bienes raíces, sorprendiendo a pocos con su reciente adquisición de tres mansiones en Austin, Texas.
Según el New York Times, Musk estaría intentando construir un tipo de complejo familiar para sus hijos y sus madres, con el fin de que todos vivan en propiedades contiguas.
Uno de los inmuebles adquiridos es una mansión de 14,400 pies cuadrados que recuerda a una villa toscana. Detrás de esta propiedad se encuentra otra mansión de seis dormitorios, que Musk también ayudó a comprar. En total, la inversión en ambas propiedades ascendió a aproximadamente 35 millones de dólares. Para un hombre cuyo patrimonio neto se estima en 272 mil millones de dólares, este gasto es relativamente menor, aunque muchos se preguntan qué tasa hipotecaria habrá conseguido el hombre más rico del planeta.
La tercera mansión, situada a poca distancia, es donde Musk reside cuando no está involucrado en sus actividades políticas, como su apoyo a Donald Trump y su trabajo en sus seis empresas. De hecho, su comité de acción política está realizando una campaña de donaciones de un millón de dólares al día a quienes firmen una petición que apoya las enmiendas primera y segunda, a pesar de que su oficina en Filadelfia lo está demandando.
El proyecto de este complejo familiar no es solo un asunto personal para Musk; también está ligado a sus preocupaciones sobre las tasas de natalidad y el repoblamiento del planeta. Su vida personal y profesional están entrelazadas de manera significativa.
Shivon Zilis, una de las madres de sus hijos y ejecutiva de Neuralink, se ha mudado a una de las mansiones junto a sus tres hijos. Sin embargo, Grimes, madre de tres de sus hijos, se encuentra en una batalla de custodia con Musk, y Justine Musk, su primera esposa y madre de cinco de sus hijos, tampoco vive en el complejo.
¿Por qué elegir Austin? Además de ser el hogar de sus empresas, Musk es el mayor empleador de la ciudad, conocida como Silicon Hills por su creciente industria tecnológica. Aunque el valor promedio de una vivienda en Austin ronda los 526,000 dólares, Musk ha ofrecido a algunos propietarios entre un 20% y un 70% por encima de sus valores de mercado.
El plan inicial de Musk era construir su complejo en cientos de acres de terreno cerca de la sede de Tesla, pero esto parece haberse desmoronado tras una investigación federal sobre el uso de fondos de la empresa para un proyecto secreto que se describía internamente como una casa para su CEO.
Por el momento, no está claro quién vivirá en las casas que ha adquirido, ya que Zilis parece ser la única que reside allí hasta ahora. Los vecinos han notado la presencia de seguridad adicional cuando Musk está en la ciudad, así como el servicio de un peluquero para un pequeño perro, en un vecindario denso y no cerrado.
Como dijo Jim Lewis, un ranchero retirado que vive cerca de la mansión de Musk: “Con tanto dinero, probablemente tiene muchos caprichos y pronto hará algo más”.
