El presunto líder del cartel de Sinaloa, Ismael "Mayo" Zambada, se declaró este viernes inocente ante los tribunales de Nueva York, donde compareció por acusación de 17 cargos por narcotráfico y homicidio.
Durante la comparecencia judicial se le notificará que de ser declarado culpable de los cargos podría enfrentar una pena mínima de cadena perpetua y ser elegible para la pena de muerte.
Los fiscales estadounidenses han calificado al presunto líder de Sinaloa como uno de los narcotraficantes más notorios y peligrosos del mundo.
Según las investigaciones, Mayo Zambada mantenía un arsenal de armas de grado militar para protegerse y para cuidar la droga que transportaba a Estados Unidos.
“Sus fuerzas de seguridad privadas, fuertemente armadas, eran utilizadas como guardaespaldas personales y como protección para los cargamentos de droga en México, Colombia, Ecuador y otros países. Además, contaba con una cuadrilla de ‘sicarios’ que llevaban a cabo horribles asesinatos y secuestros con el fin de mantener la disciplina dentro de su organización, protegerse de los desafíos de sus rivales y silenciar a quienes cooperaran con las fuerzas del orden”, detallaron los fiscales sobre el presunto líder del cartel de Sinaloa.
La investigación revela el mexicano fue capaz de asesinar a su propio sobrino; confirmando que es uno de los más temidos capos de la región,
Zambada comparece ante los tribunales luego de su polémica detención, la cual se logró tras dos décadas de búsqueda.
El presunto líder del cartel de Sinaloa denunció que fue secuestrado a la fuerza en México y llevado a Estados Unidos bajo engaños por Joaquín Guzmán López, hijo del Chapo Guzmán, quien fue declarado culpable de cargos de drogas y conspiración y condena.