La máxima autoridad de la Iglesia Católica, el papa Francisco, dijo este sábado que el Mediterráneo se ha convertido en un enorme cementerio.
El pontífice se refirió a la masiva migración que ha dejado miles de muertos, convirtiendo la región en un enorme cementerio.
Francisco resaltó que la tragedia se deriva de la necesidad de huir de los conflictos armados, la pobreza y las catástrofes naturales.
“No podemos resignarnos a ver seres humanos tratados como mercancías”, dijo en tono contundente el papa antes de cerrar su corta visita a Marsella, Francia.
Con las declaraciones, el papa recuerda a miles de personas que no lograron sobrevivir de los naufragios, dejando escenas devastadoras.
El papa Francisco pidió al mundo tener mayor sensibilidad por la crisis migratoria que ha convertido el Mediterráneo en un enorme cementerio, convirtiéndola en una ruta mortal.
"No podemos resignarnos a ver seres humanos tratados como mercancía de cambio, aprisionados y torturados de manera atroz, ni seguir presenciando los dramas de los naufragios, provocados por contrabandos repugnantes y por el fanatismo de la indiferencia", acotó.
La visita y la opinión del papa llega después que ocho mil migrantes llegaran a una pequeña isla de Italia luego de cruzar el Mediterráneo, calificado por el papa como un enorme cementerio.
Hace unos meses, más de 500 migrantes se reportaron como desaparecidos tras naufragar cerca de Grecia.