El fiscal especial Aaron Zelinsky, encargado del caso del exasesor del presidente Donald Trump, Roger Stone, renunció a su cargo en la ofician del fiscal de Washington, tras revelarse intervención política.
Según la agencia AP, la decisión de dimitir se da luego que Trump expresara quejas y solicitara una reducción de la pena.
Los fiscales reclamaron entre 87 a 108 meses de prisión (9 años); lo que generó la reacción del gobernante, quien dijo que “no puede permitir esta falta de justicia”.
Trascendió que serían dos fiscales los que renunciaron ante la solicitud de Trump de reducir las pena.
Stone, fue condenado en noviembre por mentirle al Congreso Nacional referente a la investigación sobre la injerencia rusa en las elecciones de EEUU del 2016.
La sentencia será conocida el 20 de febrero, razón por la cual Trump habría calificado como injusto el proceso.
Críticos del gobernante han alertado la injerencia de la Casa Blanca en los asuntos judiciales, pervirtiendo el Estado de Derecho.
El exfuncionario es uno de los seis miembros del entorno más cercado de Trump que fueron acusados por la intromisión rusa en las elecciones.