Un equipo de arqueólogos ha hallado en Essex, al sur de Inglaterra, vestigios de asentamientos que datan de la Edad de Bronce y de Hierro, así como del periodo romano. Estos hallazgos, realizados durante las obras para una nueva tubería de agua, han sido calificados como "extraordinariamente fascinantes"
El descubrimiento, llevado a cabo por arqueólogos supervisados por la empresa Stantec, ha revelado una "imagen detallada de la vida cotidiana de la gente común" en la antigüedad, según indicó Benjamin Sleep, principal consultor en arqueología y patrimonio de la empresa.
Durante la excavación, se encontraron pruebas de actividad en la región que se remontan a aproximadamente 3.000 años, a la Edad de Bronce Tardía.
Aunque ya se conocía la presencia de asentamientos romanos en Essex, la oportunidad de investigar una vasta extensión de campo, como parte de un proyecto de oleoducto, proporcionó una visión más amplia y detallada en comparación con las excavaciones más limitadas realizadas en áreas urbanas.
Entre los descubrimientos más notables se encuentra una granja de gran tamaño, rodeada por edificaciones que se presume fueron utilizadas para albergar ganado y como espacios de trabajo para actividades como la metalurgia y la producción de cerámica. Estos hallazgos sugieren que los romanos no solo se asentaron en la zona, sino que se integraron con las comunidades locales.
Sleep destacó que "los romanos no llegaron y simplemente erradicaron todo para establecer sus propios asentamientos", sino que hubo una notable integración con las culturas existentes. Se continuaron utilizando cerámicas locales junto con productos importados, como la cerámica samia del norte de Francia, conocida en la época romana como Galia. Esto refleja una coexistencia y una continuidad en el uso de materiales y objetos, además de señalar el nivel de comercio internacional presente incluso en áreas rurales.
La excavación, que se realizó a lo largo de un oleoducto de 19,5 kilómetros, cubrió 14 zonas diferentes. Aunque no todas las áreas excavadas revelaron hallazgos significativos, algunas ofrecieron descubrimientos sorprendentes. Según Sleep, "las zonas fueron seleccionadas porque había indicios de actividad histórica", y en varios de estos lugares se encontraron restos de gran importancia.
El proyecto de excavación duró siete meses, comenzando con cuatro meses de zanjas de prueba entre abril y septiembre de 2023, donde se evaluó el potencial arqueológico del sitio, seguidos de tres meses adicionales de excavaciones más profundas. Daniel Wilson, director de proyectos de la Essex and Suffolk Water Company, expresó su entusiasmo por los hallazgos, destacando la oportunidad de conectar a las comunidades locales con su historia de una manera más enriquecedora.
Los artefactos desenterrados, incluidos fragmentos de cerámica, objetos cotidianos y monedas, serán conservados y exhibidos en el museo local. Todos los elementos descubiertos han sido meticulosamente documentados, fotografiados y cartografiados para su uso en investigaciones futuras.
Sleep subrayó la importancia de estos descubrimientos, no solo por lo que revelan sobre el pasado, sino por su capacidad para enriquecer el conocimiento histórico y fortalecer el vínculo de las comunidades locales con su patrimonio. Este hallazgo confirma la significativa actividad romana en la zona y amplía la comprensión de la historia antigua de Essex.
El descubrimiento de estos asentamientos ofrece una valiosa ventana al pasado, mostrando cómo vivían y trabajaban las personas en diferentes periodos históricos. La integración de culturas y el comercio internacional, evidenciado por los hallazgos de cerámica y otros objetos, resaltan la complejidad y la riqueza de la historia en la región.
Estos hallazgos no solo enriquecen la historia local de Essex, sino que también proporcionan a los arqueólogos y a la comunidad un legado tangible del pasado, subrayando la importancia de la preservación y el estudio continuo del patrimonio arqueológico.