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Un grupo de monitoreo de derechos humanos informó el jueves que las fuerzas armadas de Israel emplearon proyectiles de fósforo blanco en los últimos días en Gaza y el Líbano. Estas municiones son capaces de causar graves quemaduras y se consideran particularmente peligrosas para los civiles debido a su naturaleza indiscriminada.
Según Human Rights Watch, videos grabados el martes y miércoles en el Líbano y Gaza mostraron la liberación de proyectiles de fósforo blanco desde el aire. Esta evaluación fue vehementemente refutada por funcionarios israelíes. Además, Human Rights Watch respaldó su análisis con entrevistas a testigos en el terreno que describieron un olor característico similar al ajo, una característica distintiva del fósforo blanco.
Un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) declaró: "La acusación actual dirigida a las FDI sobre el uso de fósforo blanco en Gaza es categóricamente falsa. Las FDI no han empleado tales municiones". Un portavoz del primer ministro Benjamín Netanyahu no respondió a una solicitud de comentarios.
Las municiones de fósforo blanco tienen el potencial de "causar quemaduras e irritación, daños al hígado, riñones, corazón, pulmones u huesos, y la muerte", según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Si bien el derecho internacional permite ciertos usos de fósforo blanco, como la creación de cortinas de humo o la generación de luz, los grupos de derechos humanos sostienen que su despliegue en áreas que podrían dañar a civiles o su lanzamiento desde el aire viola las leyes internacionales de derechos humanos. No se ha podido confirmar si había civiles en las áreas donde presuntamente se usó fósforo blanco, siendo Gaza una de las regiones más densamente pobladas del mundo.
Es importante señalar que Israel no ha firmado ni está obligado por la Convención de las Naciones Unidas sobre el uso de fósforo blanco. Human Rights Watch ha documentado previamente el uso de fósforo blanco por parte de Israel en el conflicto militar de 2009, una afirmación respaldada por la Cruz Roja Internacional. En 2013, Israel declaró que solo usaría fósforo blanco en circunstancias limitadas, según Human Rights Watch.
Las municiones utilizadas esta semana en Gaza y el Líbano eran proyectiles de artillería de 155 mm que estallan en el aire, dispersando fósforo blanco en áreas extensas. Según Human Rights Watch, "el uso de fósforo blanco en zonas densamente pobladas de Gaza viola el requisito del derecho internacional humanitario".
Amnistía Internacional también respaldó la evaluación de Human Rights Watch sobre el uso aparente de fósforo blanco en los ataques. La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos anunció que estaba investigando estas acusaciones.
Un cirujano palestino en Gaza informó sobre lesiones que parecían ser causadas por fósforo blanco y expresó su preocupación por el uso de este tipo de armamento. Un fotoperiodista de Getty afirmó haber documentado ataques con fósforo blanco en Gaza.
Estas afirmaciones surgen en un contexto en el que Israel parece estar preparando un ataque terrestre en Gaza y ha instado a más de un millón de personas a evacuar el norte del enclave densamente poblado. Desde entonces, se ha producido un alto número de víctimas mortales en ambos lados del conflicto.
