Dani Alves, el reconocido exjugador del Barcelona y de la selección brasileña, quien ha sido condenado a 4 años y 6 meses de prisión por violación, recibió apoyo financiero de su excompañero de equipo, Neymar, logrando reducir la pena.
La condena incluye, además, 5 años de libertad vigilada tras su salida de prisión y una multa económica significativa. Con una situación financiera desfavorable y sus cuentas embargadas, Alves recibió el apoyo económico necesario para indemnizar a la víctima, lo que contribuyó notablemente a mitigar su condena, ya que la fiscalía española planteaba 9 años de prisión.
El aporte de 150.000 euros (aproximadamente 160.000 dólares) fue abonado con la ayuda de la familia de Neymar, para indemnizar a la víctima por el “daño moral y las lesiones sufridas”.
Antes de la celebración del juicio, se realizó el depósito del dinero en la cuenta del tribunal con la finalidad de que dicho monto fuera entregado a la víctima, sin importar el veredicto que se dictara.
La familia de Neymar, que también proporcionó asistencia legal al ex lateral del Barcelona, ha generado controversia y debate en la opinión pública. Mientras algunos lo ven como una muestra de lealtad y apoyo entre compañeros, otros cuestionan si el dinero debería influir en el proceso judicial y la aplicación de la ley.
Por su parte, según informes, la víctima, al enterarse de la decisión judicial, expresó un profundo agradecimiento y alivio por haber sido respaldada durante todo el proceso. Sin embargo, también se enfrentó a la difícil tarea de lidiar con la atención mediática y proteger su identidad en medio de un escrutinio público intenso.