Expertos en leyes han avizorado bajas posibilidades de que Donald Trump revierta los resultados electorales, luego que cuatro demandas retiradas o desestimadas minimizaran sus posibilidades de continuar en el poder.
El pasado lunes cuatro de las demandas han sido desestimadas o retiradas por el mismo equipo del mandatario, mermando a Trump la posibilidad de continuar en el poder en el 2021 como buscan hacerlo por medio de denuncias de fraude electoral.
‘El lunes una serie de caídas en los estados indecisos prácticamente han erradicado las posibilidades de Donald Trump de cambiar el resultado de las elecciones antes de que el Colegio Electoral las finalice’, indicaron analistas.
La campaña de Trump lanzó mucho antes de las elecciones acciones legales que buscaban descalificaban la votación anticipada por correo y que dio a Biden una ventaja arrasadora en los comicios del 3 de noviembre.
Además, señalaron que el equipo de Trump ha utilizado una estrategia similar y respaldos del abogado conservador James Bopp Jr que busca impugnar la legalidad de algunos votos en Georgia, Pensilvania, Michigan y Wisconsin.
El peor día para Trump fue el pasado viernes, cuando se reportaron nueve casos anulados, entre estos varios presentados en Pensilvania.
‘Un caso en Pensilvania había intentado descartar las papeletas de votación por correo que llegaban tarde y debido a que reflejaba la estrategia de los cuatro casos retirados el lunes’, citan informes.
Estos y otros casos desestimados y retirados merman la posibilidad de Trump de continuar en el poder como busca hacerlo a pesar de que las proyecciones son irreversibles.
"El camino legal de Trump para revocar los resultados electorales parece 100 por ciento muerto", dijo al respecto el experto en leyes electorales, Rick Hasen.
Desde septiembre del 2019, Trump denunció que sería víctima de un fraude electoral por medio de la votación anticipada y el cual ha sido el argumento para intentar desestimar los resultados que dan como ganador a Biden.
Según proyecciones, el gane del líder demócrata es de 306 votos electorales, una victoria contundente que además lo convierte el candidato más votado de la historia de los EEUU.