La lucha contra la criminalidad en Ecuador ha provocado el enojo de las organizaciones delictivas, provocando una crisis en pleno estado de excepción.
Según información de medios locales, el secuestro de cuatro policías ha dejado al descubierto lo bien organizado que está la criminalidad en el país latinoamericano.
El conflicto entre el gobierno y las pandillas en Ecuador comenzó cuando el presidente Daniel Noboa anunció importantes cambios las cárceles del país.
Inmediatamente, reos de alta peligrosidad, que manejan desde prisión las estructuras criminales, empezaron a presionar a Noboa, quien ha decretado estado de excepción.
"Al menos cuatro policías fueron secuestrados en Ecuador, tras la fuga del jefe de la principal banda de narcotráfico, Adolfo Villamar Macías, alias "Fito", detalla un tuit publicado por la Policía del país.
Se indicó que los uniformados se encontraban de turno en una de las postas o estaciones de policía de la ciudad de Machala cuando se produjo el secuestro protagonizado por hombres armados que se transportaban en un vehículo sin placa..
El secuestro de los uniformados se da a pocas horas que Noboa declarara estado de excepción, el cual estará en vigor por 60 días a partir del pasado lunes.
"Se incluye el toque de queda de seis horas que empezó a las 11:00 de la noche hasta las 5:00 de la madrugada y la decisión de que las Fuerzas Armadas intervengan en el control de las cárceles", se notificó desde el gobierno sobre la medida para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
El presidente Noboa ha sido claro al indicar que no negociará con la criminalidad, a la cual ha calificado como terrorista.
"Nosotros no vamos a negociar con terroristas ni descansaremos hasta devolverles la paz a los ecuatorianos", expresó Noboa al confirmar el estado de excepción en un video difundido en su cuenta de Instagram.
El enojo de las organizaciones criminales se desencadenó cuando el presidente ecuatoriano anunció la construcción de dos prisiones de máxima seguridad para alejar a los reclusos de alta peligrosidad de las ciudades.
“Se acabó el tiempo en el que los condenados por narcotráfico, sicariato y el crimen organizado le dictaban al gobierno de turno qué hacer. Lo que estamos viendo en las cárceles del país es el resultado de la decisión de enfrentarlos”, dijo Noboa sin imaginar que el crimen organizado tendría su respuesta.
A pesar de los esfuerzos del gobierno, la fuga de "Fito" mantiene en zozobra a la población y en constantes operativos a la policía del país para dar con el paradero del prófugo, considerado de alta peligrosidad.
Ante la situación de seguridad que vive el país, el presidente @DanielNoboaOk toma acciones concretas para respaldar a las Fuerzas Armadas durante el proceso de intervención y control de cárceles.#ElNuevoEcuador pic.twitter.com/SUCR5aEFZl
— Presidencia Ecuador 🇪🇨 (@Presidencia_Ec) January 8, 2024