El gobierno de China ha realizado prácticas militares en el Estrecho de Taiwán con fuego real a menos de 24 horas de la visita de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos (EEUU).
Desde que se conoció la intención de la alta funcionaria estadounidense de llegar a la nación, China advirtió de consecuencias atroces.
Para el gobierno de Xi Jinping la llegada de Pelosi representa una clara provocación de la gestión de Joe Biden.
Según medios locales, las maniobras militares en el Estrecho de Taiwán comenzaron a pocas horas que se registrara la llegada de Pelosi a la isla separatista.
La actividad militar china ha sido calificada por Taiwán como un bloqueo y una violación a los derechos de su nación.
“Estas prácticas militares causaron el cierre del espacio marítimo y aéreo en seis zonas alrededor de la isla, una de ellas a unos 20 kilómetros de la costa de Kaohsiung, principal ciudad al sur de Taiwán”, se informó sobre las acciones de China tras la llegada de Pelosi, las cuales se han sentido en el Estrecho de Taiwán.
Expertos señalaron que no sería EEUU el que pagaría las consecuencias del desafío hecho por Pelosi, sino que la isla separatista.
La líder taiwanesa, Tsai Ing-wen, dijo el miércoles que no retrocederán a pesar de las amenazas de China.
“Frente a las crecientes y deliberadas amenazas militares, Taiwán no retrocederá… Mantendremos la línea de defensa de la democracia”, acotó.