Ingenieros estadounidenses han descubierto que China ha colocado aparatos de desconexión que podrían desestabilizar las redes eléctricas del país norteamericano.
Los kill switches, como se les conoce a los componentes que China ha fabricado y utilizado en las granjas solares, han generado preocupación ante la posibilidad de que el país logre manipular el suministro eléctrico.
"Puede destruir físicamente las redes eléctricas en Estados Unidos, Reino Unido y Europa", aseguraron los ingenieros que lograron identificar los aparatos que pueden desestabilizar las redes eléctricas del EEUU y otras naciones.
Los funcionarios están evaluando los riesgos para la nación que fueron encontrados en los inversores de energía, considerados componentes esenciales de los sistemas de energía renovable que los conectan a la red eléctrica.
"Los inversores (donde se encontraron los componentes) están diseñados para permitir el acceso remoto para actualizaciones y mantenimiento", se indicó.
Aunque se suelen instalar cortafuegos para evitar la comunicación directa con China se ha confirmado que los dispositivos permiten eludir los cortafuegos y apagar los inversores de forma remota o alterar sus configuraciones.
Ese acceso podría permitir a China desestabilizar las redes eléctricas del EEUU y otras naciones, provocando los apagones generalizados.
Los expertos han señalado que la dependencia de los sistemas de energía provenientes de China podría causar estragos en las redes eléctricas de EEUU y otras partes de Occidente.