El Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos informó que existen pocas probabilidades que en el Caribe se forme una nueva depresión tropical.
La buena noticia llega en un momento de tensión en Centroamérica por el paso del huracán Iota y significa un alivio para las naciones.
Según los pronósticos el sistema se dirigirá lentamente hacia el oeste, rumbo a Centroamérica pero sin representar un peligro como lo fueron los huracanes Eta y Iota.
A pesar que las proyecciones son alentadores por las pocas probabilidades que se fortalezca, el Centro Nacional de Huracanes ha detallado que de convertirse en una depresión tropical llegará a Nicaragua, Costa Rica y Panamá.
‘Es posible que se produzcan inundaciones repentinas en algunas de estas áreas durante los próximos días’, cita el informe pero sin generar alerta como lo hizo con Iota y Eta.
Además, se indicó que si el sistema llega a tormenta tropical se le daría el nombre de Kappa, pero sus probabilidades son menos del 20 por ciento.
El Atlántico ha producido durante la temporada ciclónica 30 tormentas, rompiendo el récord de las 28 que se registraron en el 2005.
La temporada de huracanes aún no concluye y se ha previsto la posibilidad de que se extienda más del 30 de noviembre por los efectos del cambio climático.
En mayo del 2020 servicios meteorológicos AccuWather alertaban que la época ciclónica sería mucho más activa con unas 12 tormentas tropicales y 6 huracanes.
“El año pasado, pronosticamos una temporada de huracanes casi promedio y terminamos un poco más activos de lo que pensábamos”, dijo el experto sobre las probabilidades de una agitada temporada que hoy deja devastación en Centroamérica, Colombia y México.