El candidato presidencial y capitán retirado, Santos Orellana, quien denunció los actos de narcotráfico de Juan Antonio Hernández, hermano del actual presidente hondureño, fue capturado este jueves por supuesto lavado de activo.
La captura del exmilitar se registró en el aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa, capital de Honduras, cuando era acompañado por su esposa, Jennifer Bonilla.
Durante la captura del exmilitar que denunció los actos de corrupción del hermano de Juan Orlando Hernández se reportó la aprehención de su esposa y su suegra, Reina Bonilla.
«De acuerdo con investigaciones iniciadas años atrás, un testigo protegido originario del sector de Brus Laguna, Gracias a Dios manifestó que el excapitán realizaba operativos en la zona y al encontrar dinero o droga no la declaraba en su totalidad quedándose con parte de lo incautado», cita el comunicado del Ministerio Público.
#MP captura a excapitán vinculado a criminalidad organizada y tráfico de drogas https://t.co/9WQm4jgRBv pic.twitter.com/llbxreX3tT
— Ministerio Público (@MP_Honduras) November 4, 2021
Según las autoridades el candidato a la presidencia, conocido por que denunció y expusó al hermano del presidente, recibió más de 230 millones de lempiras de ingresos injustificados provenientes de sus presuntas actividade ilícitas.
UNA VENGANZA
Por su parte, el excapitán Santos Orellana dijo que todo se trataba de un venganza por haber revelado los nexos de Hernández con el narcotráfico.
«Estamos viendo lo ilegal de esto, cómo es posible ser captura por lavado de activos y narcotráfico», dijo en tono de pregunta cuando era trasladado a una posta policial.
Hizo referencia a que todo se encamina a una venganza del presidente porque su hermano está preso en EEUU. «A mí me pueden buscar lo que quiera yo no tengo naa que esconder».
No es la primera vez que el exmilitar sufre persecución por parte de los entes de seguridad. El 6 de mayo del 2019 lementos de la policía asignados a la posta de El Durazno retuvieron al exuniformado.