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El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, en reiteradas ocasiones ha hablado sobre sus planes durante los primeros 100 días de su administración, y entre los principales objetivos están: una reforma migratoria y una recuperación de la economía devastada por la pandemia de Covid-19.
Durante un discurso en Wilmington, Delaware, Biden dijo: “Presentaré un proyecto de ley de inmigración de inmediato y lo enviaré a los comités (del Congreso) apropiados para iniciar el proceso”.
Biden sostiene que en sus primeros 100 días como presidente de Estados Unidos, impulsará al menos 16 acciones, entre las que destacan: una reorientación de las políticas de aplicación de la ley a través de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), protección a los dreamers, una mejoría en los procesos para la obtención de la ‘Green Card’ y la naturalización y más opciones para que los inmigrantes puedan realizar el servicio militar.
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“Enfocarse en personas que nunca han sido condenadas por un delito grave y que han vivido, trabajado y contribuido a nuestra economía y nuestras comunidades durante décadas es la definición de contraproducente”, dijo Biden.
“Se pondrá fin a las redadas en el lugar de trabajo para garantizar que las amenazas basadas en el estado de los trabajadores no interfieran con su capacidad para organizarse y mejorar sus salarios y condiciones laborales”, sostuvo “La desastrosa política de Trump de ‘medidor’, que limita la cantidad de solicitudes de asilo aceptadas por día, obliga a las personas que buscan asilo a esperar durante semanas en las calles en ciudades fronterizas mexicanas, a menudo peligrosas, antes de que se les permita presentar la solicitud”, agregó.
El Dr. Nestor Castillo experto en temas migratorios indicó que las políticas antimigrantes de Trump pueden ser modificadas por órdenes ejecutivas o procesos administrativos sobre interpretación de las leyes actuales.
“Desde luego, vamos a ver de todas las propuestas migratorias que el señor Biden ha hecho, cuáles realísticamente va a poder implementar”, dijo Castillo. “Una de las más fáciles es toda acción ejecutiva que el presidente Trump ha tomado puede ser revertida por otra acción ejecutiva del presidente Biden, se puede llevar a cabo inmediatamente”.
