Foto: John Moore, AFP
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó este lunes que las tropas estadounidenses abandonarán Irak a finales del 2021, sin embargo permanecerán en el país un número no determinado de soldados con el fin de entrenar y asesorar al ejército iraquí.
En declaraciones a la prensa en el Despacho Oval de la Casa Blanca y en presencia del primer ministro de Irak, Mustafa Al Kazimi, Biden dijo que “no vamos a estar a final de año en una misión de combate”.
“Estamos comprometidos con nuestra cooperación en materia de seguridad. Nuestra lucha contra el Estado Islámico (EI) es vital para la estabilidad de la región y nuestra cooperación contra el terrorismo continuará mientras entramos en esta nueva fase”, anunció Biden.
Sin embargo, Biden no dio un número exacto de efectivos que permanecerán en Irak para continuar la lucha contra el EI y para hacer frente a las milicias chiíes aliadas con Teherán, que en los últimos meses han perpetuado más ataques contra tropas estadounidenses.
Asimismo, Biden dirigió unas palabras a Al Kazimi, diciendo que “Nuestra nación ahora es más fuerte que nunca”
Por su parte, el denominado Comité de Coordinación de la Resistencia Iraquí amenazó el viernes con continuar con los ataques hasta que se retiren todas las tropas estadounidenses y termine la “ocupación”.
Desde el 2003, Estados Unidos ha mantenido una presencia militar continua en Irak. El expresidente George W. Bush había ordenado una invasión a Irak bajo la excusa de que Sadam Hussein poseía armas de destrucción masiva.
Sin embargo, su sucesor Barack Obama, retiró por completo en el 2011 todas las tropas estadounidenses de Irak, pero ordenó su regreso en el 2014 para liderar una coalición internacional contra el EI.
La mayoría de las tropas estadounidenses enviadas en 2014 como parte de la alianza para ayudar a Bagdad a derrotar al Estado Islámico fueron retiradas bajo el mandato del presidente Donald Trump.
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