El instinto de sobrevivencia los obliga a tratar de sacar agua hasta de los aires condicionados.
El exterminio de diez mil camellos en Australia se ejecuta desde el miércoles, luego que líderes aborígenes ordenaran la eliminación masiva por la extrema sequía que azota el país.
Los camellos salvajes desesperados por la sed han recorrido grandes distancias en busca de agua, realizando estragos en las comunidades locales a las que llegan.
El instinto de sobrevivencia los obliga a tratar de sacar agua hasta de los aires condicionados, atacando a los seres humanos que habitan en las comunidades.
Además, se reporta que miles de estos han muerto por la sed y que se busca mermar su agonía.
"Un millón de camellos salvajes están emitiendo el equivalente a una tonelada de CO2 al año son lo mismo que tener 400.000 coches adicionales en las carreteras", dijeron autoridades locales al justificar el exterminio.
Australia, vive una crisis ambiental producto de los incendios forestales que han dejado devastación y muerte de millones de animales.
Las consecuencias a largo plazo por la quema de 6 millones de hectáreas de bosque aún son desconocidas.
