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Cerca de 450 pacientes de un hospital en Massachusetts se encuentran en alerta después de una potencial exposición a la hepatitis y el VIH debido a errores en la administración de medicación intravenosa en los últimos dos años, según las autoridades hospitalarias.
La situación se reveló tras la realización de endoscopias, un procedimiento médico que implica la introducción de un instrumento tubular en el cuerpo para su examen.
Aunque los detalles sobre cómo ocurrió la posible exposición no han sido divulgados por el hospital, la administración ha notificado a todos los pacientes afectados y ha llevado a cabo pruebas de hepatitis B, hepatitis C y VIH como medida preventiva.
Un portavoz del Hospital de Salem declaró a CNN por correo electrónico que estas pruebas son estándar para situaciones de posible exposición y, hasta la fecha, no se han encontrado pruebas de infección derivada de este incidente.
El hospital enfatizó que el riesgo de infección para los pacientes es extremadamente bajo y emitió una disculpa sincera a aquellos afectados.
La posible exposición fue descubierta este año, desencadenando una respuesta rápida por parte del hospital. Además de las pruebas de detección gratuitas, se ha establecido una línea directa con personal clínico para abordar cualquier pregunta o inquietud que puedan tener los pacientes.
El Departamento de Salud Pública de Massachusetts está al tanto de la situación y ha llegado a la conclusión de que el riesgo de infección es mínimo, según un comunicado.
Esta no es la primera vez que un incidente de este tipo ocurre en la atención médica. En 2018, más de 3,000 pacientes en un centro de cirugía en Saddle Brook, Nueva Jersey, enfrentaron un riesgo similar debido a prácticas inadecuadas de esterilización. En 2008, un brote de hepatitis C en Las Vegas también se relacionó con prácticas poco seguras en un centro de endoscopia.
