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Un policía australiano está bajo investigación luego de enviar a cuidados intensivos a una abuelita de 95 años tras dispararle con un “taser”.
El caso no solo ha indignado a los ciudadanos de la comunidad donde ocurrió, medios internacionales han publicado la noticia en sus distintas emisiones.
De acuerdo con datos recabados, la abuelita de 95 años atacada con un “taser” se encontraba en un centro de cuidados de ancianos.
“Clare Nowland padece de demencia y se encontraba en una silla de ruedas cuando supuestamente atacó al uniformado con un cuchillo”, cita el informe policial.
Ante la viralización e indignación ciudadana por el hecho de violencia policial, el sub comisionado de la policía de Nueva Gales del Sur, Peter Cotter, tuvo que dar explicaciones a la prensa sobre el agente que disparó con el “taser” a la abuelita de 95 años.
“En el momento que le dispararon, se acercaba a la Policía. Es justo decir a un ritmo lento. Ella tenía un caminador. Pero tenía un cuchillo”, dijo el oficial.
Agregó que no sabe cómo el agente tuvo el valor de usar el “taser” con la anciana. “No puedo seguir pensando en lo que estaba pasando por la mente de alguien”.
La comunidad está indignada y exigen que el uniformado sea requerido por intento de homicidio, ya que la abuelita está grave de salud.
Familiares se han resignado a que la anciana no se recuperará del disparo con el “taser” por su deteriorado estado de salud.
Sus seres queridos han calificado el hecho como un atropello de las autoridades y exigen justicia.
En el 2022, el departamento de Policía de Atlanta y un oficial deberán pagar un total de $100 millones a Jerry Blasingame, un hombre de 69 años de edad, que quedó paralizado luego que un agente policial lo electrocutara con una pistola “taser”.
