EEUU.- El programa de tarjetas de débito prepagadas para inmigrantes en Nueva York llegó a su fin a menos de una semana de que se anunciara el triunfo del magnate Donald Trump.
Fue el alcalde de la ciudad, Eric Adams, quien anunció que el programa llegó a su fin después de meses de polémica y debate sobre la factibilidad del programa, que era financiado con los impuestos de los contribuyentes.
Las tarjetas de débito prepagadas les daba a los inmigrantes la posibilidad de comprar alimentos y suministros básicos que garantizaban que tuvieran comida en sus mesas.
Con la finalización del proyecto se desconoce cuál será el futuro de las familias migrantes que dependían de la asistencia para cubrir sus necesidades esenciales, como alimentos, papel higiénico u otros productos de primera necesidad.
El edil de Nueva York detalló que el programa le costó a Nueva York unos tres millones de dólares en siete meses; una cantidad calificada como "exorbitante" por los críticos del programa, que buscaba ayudar a familias con lo más básico.
Se estima que las tarjetas de débito prepagadas para inmigrantes beneficiaron a unas 2,600 familias, otorgando una cantidad semanal de 350 dólares para un clan de cuatro personas.
La oficina del alcalde informó que buscarán nuevos programas pilotos para ayudar a las familias que quedarán desamparadas.