El gobierno ruso reiteró su decisión de no permitir el matrimonio gay en la nación a pesar del dictamen del Tribunal Europeo sobre proporcionar un marco legal a la comunidad LGTBI.
Medios locales han destacado que la gestión de Vladimir Putin rechazó la iniciativa de regularizar las uniones de personas del mismo sexo.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) exigió a Rusia respetar los derechos de las personas de la comunidad LGTBI, recomendando proporcionar un marco legal para estas relaciones.
El mandatario al conocer la resolución dijo que no existe la necesidad de buscar ninguna forma alternativa de inscripción del matrimonio gay.
“No existe necesidad de buscar ninguna forma alternativa de inscripción”, dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dimitri Peskov.
Indicó que el presidente Vladimir Putin no reaccionó al dictamen del Tribunal Europeo, lo que significa que no tiene pensado acatar dicha disposición.
“Rusia violó el artículo 8 de la Convención Europea de Derechos Humanos sobre el derecho al respeto a la vida privada y familiar, al negar la posibilidad de matrimonio a tres parejas homosexuales”, cita la resolución.
Según el gobierno ruso, no están en la obligación de respetar dicha disposición porque su Constitución es clara al indicar la definición de matrimonio, impidiéndole cumplir el dictamen.
“El país no está obligado a acatar los dictámenes de tribunales internacionales que entren en contradicción con las normas nacionales, al marcar la prevalencia del texto constitucional sobre el Derecho Internacional”, indicaron expertos sobre el fallo del Tribunal Europeo.
Por su parte, Amnistía Internacional hizo un llamado a derogar la ley rusa “sobre la propaganda de relaciones sexuales no tradicionales” entre menores, considerada una norma homofóbica.
Rusia, prohíbe todo tipo de películas, propaganda e información que promueva el movimiento gay en la nación.