El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha advertido mediante un informe que la actual sequía en el Cuerno de África amenaza con dejar a 13 millones de personas en riesgo de sufrir hambre severa.
Tal situación provoca considerables daños agrícolas en la región. Somalia, Etiopía y Kenia ya padecen consecuencias de lo que podría ser la mayor sequía registrada en las últimas cuatro décadas.
Asimismo, el programa de la ONU ha señalado que luego de tres estaciones de lluvia con bajos niveles de precipitaciones, ha provocado el daño y pérdidas de cosechas y hasta la alta mortalidad del ganado, si no se toman medidas al respecto esta situación podría empeorar.
Por su parte, el director del PMA para el este de África, Michael Dunford, indicó que se requiere de una "acción humanitaria inminente", y aspira a recaudar 327 millones de dólares, cifra que permitirá ayudar a 4,5 millones de personas en los próximos seis meses.
Cabe mencionar que, el Gobierno de Kenia declaró una emergencia nacional desde el año pasado. Se estima que en Kenia unos 2,8 millones de personas requieren de asistencia alimentaria, en Somalia se prevé que el número de personas clasificadas como gravemente hambrientas podría aumentar de 3,5 millones a 4,6 millones en mayo a menos que se tomen medidas urgentes.
En Etiopía unos 5,7 millones de habitantes necesitan asistencia alimentaria, incluidos medio millón de niños y madres desnutridos, informó la AFP.
Durante la pandemia en el 2020, la crisis económica detonó uno de los mayores aumentos del hambre en el mundo en décadas, afectando a casi todos los países.
Del número total de personas desnutridas en 2020, más de la mitad (418 millones) vive en Asia y más de un tercio (282 millones) en África, mientras que en América Latina y el Caribe habita el 8% (60 millones), según un informe de las Naciones Unidas.